Resulta que la piel de tus manos es tan importante como la de tu rostro, y se merece todo el cuidado necesario para mantenerlas suaves y sanas.
Muchas veces nos enfocamos tanto en el cuidado de nuestro rostro, que dejamos de prestar atención a otras partes de nuestro cuerpo, cuya dermis también requiere nutrición e hidratación. Esto suele ocurrir con las manos, posiblemente la parte del cuerpo más expuesta a los elementos y más vulnerable a mostrar señales tempranas de envejecimiento.
Además, y como consecuencia de todo lo que hacemos con nuestras manos en el día a día, tendemos a lavarlas muy a menudo, y aunque parezca contradictorio, el contacto excesivo con el agua puede hacer que las manos pierdan sus aceites naturales que le dan elasticidad a la piel y la mantienen más joven.
Nuestras manos son nuestra carta de presentación al mundo, y aun llevando la mejor manicura, la piel de tus manos no puede quedar desatendida. Si quieres aprender cómo cuidarla de forma sencilla y con ingredientes naturales, sigue leyendo.
Probablemente este ingrediente te resulta familiar, y es que suele estar presente como activo en muchos productos para la piel con propiedades antienvejecimiento gracias a sus increíbles poderes para retener la hidratación del cuerpo.
La realidad es que este compuesto también puede hacer maravillas en manos, solo tienes que adquirir una ampolla de ácido hialurónico –mientras más puro mejor– y aplicar unas gotas sobre tus manos y masajear suavemente.
Otra técnica de cuidado facial que puede beneficiar nuestras manos, las mascarillas con ingredientes concentrados las pueden hidratar y nutrir profundamente. Si bien es posible encontrar en el mercado mascarillas diseñadas específicamente para manos, estás no son muy comunes, por lo que una buena idea es tomar la ruta do it yourself y preparar una mascarilla en casa, combinando una loción hidratante de acción profunda con algún ingrediente con propiedades nutritivas como el aceite de coco o la palta.
La clave para lograr un resultado de spa es, tras aplicar la mascarilla hecha en casa en tus manos, envolver tus manos en guantes, una tela o incluso calcetines, lo que permitirá que los ingredientes penetren más profundamente en tus manos.
También puedes probar un tratamiento de parafina con un profesional o en casa –si cuentas con los implementos adecuados– ya que las propiedades de este compuesto hidratan hasta las capas más profundas de tus manos.
Utilizar una crema de manos de manera frecuente sigue siendo la forma más sencilla de mantener la suavidad e hidratación de nuestras manos, pero hay varias medidas que podemos tomar para lograr el máximo beneficio. Lo primero que podemos hacer es escoger una loción con acción prolongada, resistente al agua y libre de alcohol –sobre esto habláremos en un rato–. No olvides llevar siempre contigo una crema de manos en tu bolso y crea el hábito de aplicarla cada ciertas horas, y no solo cuando sientas la resequedad. Por ejemplo, puedes acostumbrarte a utilizarla cada vez que llegas a tu oficina o tras realizar labores del hogar.
¿Eres de las personas que utilizan un hidratante facial para el día y otro para la noche? Si la respuesta en sí, puede ser buena idea replicar esta estrategia con tus manos, aplicando, durante el día, una loción de formulación ligera que te permita realizar todas tus actividades, y durante la noche, utilizar un hidratante más espeso que dejará tus manos suaves y resplandecientes cuando te despiertes al otro día.
Aunque existe en el mercado desde hace mucho tiempo, el uso del alcohol gel y otros sanitizantes de manos se elevó a niveles nunca antes vistos desde el inicio de la pandemia por el covid-19. Estas son buenas noticias para nuestra salud, ya que el uso del alcohol gel contribuye a eliminar gérmenes y disminuir la posibilidad de contagio, pero sus efectos no son los mejores para la piel de nuestras manos, ya que el alcohol por naturaleza es un compuesto que genera resequedad.
La solución, por supuesto, no es dejar de utilizar sanitizante de manos, si no que escoger productos que contengan ingredientes que contrarrestan el alcohol como aceites esenciales, aloe vera o glicerina, sin evitar que sea efectivo contra los gérmenes.
No solo en verano, si no que todo el año, el uso de protector solar es esencial para mantener la salud y juventud de nuestra piel, incluida la de nuestras manos, por lo que es recomendable que tras utilizar tu hidratante predilecto, lo selles con una capa de protector solar resistente al agua.
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La clave para preservar la salud y juventud de tu piel está, literalmente, en tus manos, por lo que no olvides aplicar estos tips para que tus manos cobren el protagonismo que merecen y se conviertan en tu carta de presentación hacia el mundo.
